sábado, 24 de septiembre de 2011

EL SISTEMA DIGESTIVO DEL SER HUMANO

Es muy similar al del resto de los mamíferos, pero presenta algunas midificaciones.

Observa el siguiente esquema del sistema digestivo humano

EL TUBO DIGESTIVO
El tubo digestivo es el responsable de ingerir, almacenar y digerir los alimentos, absorber sus nutrientes y almacenar sus desechos hasta su eliminación.
El proceso digestivo comprende una etapa de entrada del Alimento (ingestión), una etapa de preparación del alimento, que tiene lugar en la boca (digestión mecánica); otra de tratamiento del alimento (digestión química), los componentes útiles y asimilables (nutrientes) se separan de los residuos e ingresan en la sangre (absorción)mediante una serie de acciones físicas y químicas que se efectúan en el estómago y primera parte del intestino; y por último la fase en la que esos desechos son excretados del cuerpo (egestión). 

 
LA BOCA



La boca cumple una función clave en el aparato digestivo, y hace mucho más que iniciar la digestión. La boca, especialmente los dientes, los labios y la lengua, es esencial para el habla. La lengua, que nos permite saborear, también nos permite formar las palabras cuando hablamos. Los labios que delinean la parte exterior de la boca nos ayudan a sostener los alimentos cuando masticamos y a pronunciar las palabras cuando hablamos.
Los dientes son necesarios para la masticación, el proceso por el cual desgarramos, cortamos y molemos los alimentos en preparación para la deglución. La masticación permite la liberación de enzimas y lubricantes en la boca que promueven la digestión, o descomposición, de los alimentos.
 Existen varios tipos de dientes. Los incisivos son los dientes cuadrados, con borde afilado en la parte delantera de la boca. Hay cuatro en la base y cuatro en la parte superior. A cada lado de los incisivos están los caninos afilados. Los caninos superiores suelen ser llamados colmillos.
Los molares, situados por detrás de los premolares, tienen puntas y estrías. Hay 12 molares, tres juegos en cada maxilar, llamado primer, segundo y tercer molar. Los terceros molares son las "muelas del juicio", que algunos consideran se desarrollaron hace miles de años, cuando la dieta humana consistía, fundamentalmente, de alimentos crudos que requerían más fuerza de masticación. Pero como pueden desplazar a los otros dientes, a veces el dentista debe extraerlas.
La superficie superior de la lengua está cubierta con diminutas protuberancias llamadas papilas. Éstas contienen poros muy pequeños que son nuestras papilas gustativas. Hay cuatro clases de papilas gustativas agrupadas en ciertas áreas de la lengua, que pueden sentir los sabores dulces, salados, agrios y amargos.

LA FARINGE


La faringe es un tubo musculoso situado en el cuello y revestido de membrana mucosa; conecta la nariz y la boca con la tráquea y el esófago. Por la faringe pasan tanto el aire como los alimentos. En el hombre mide unos trece centímetros, ubicándose delante de la columna vertebral.

Como arranca de la parte posterior de la cavidad nasal, su extremo más alto se llama nasofaringe. La inferior, u oro faringe, ocupa la zona posterior de la boca. Termina en la epiglotis, un pliegue cartilaginoso que impide la entrada de alimentos en la tráquea, pero no obstaculiza su paso al esófago. Para que las vías respiratorias permanezcan cerradas durante la deglución (o acción de tragar), la epiglotis obstruye la glotis para impedir que el alimento se introduzca en el sistema respiratorio.


EL ESOFAGO

Este conducto muscular se sitúa entre el extremo inferior de la laringofaringe y el superior del estómago. Tiene una longitud que oscila entre los 23 y los 25 centímetros, siendo su principal función la de transportar el alimento hacia el estómago.
El alimento avanza por el esófago hacia el estómago mediante un movimiento muscular involuntario denominado peristaltismo, originado en la capa muscular. El peristaltismo -controlado por el sistema nervioso- supone una serie de contracciones y relajaciones del esófago, que en forma de ondas se desplazan hacia abajo y propulsan el bolo alimenticio hacia el estómago. Este proceso se ve facilitado por el moco secretado por las glándulas mucosas.


EL ESTOMAGO


 
El estómago es un saco hueco y elástico con forma de J, siendo la parte más ancha del tubo digestivo. Su superficie externa es lisa, mientras que la interna presenta numerosos pliegues que favorecen la mezcla de los alimentos con los jugos digestivos.
En este lugar las sustancias alimenticias permanecen almacenadas durante un tiempo antes de pasar al intestino en un estado de digestión avanzado.
En el estómago el alimento permanece entre tres y seis horas. Luego, pasa al intestino, donde se le agregan otros jugos desintegradores procedentes del páncreas y la pared intestinal.
El estómago es musculoso, por lo que gracias a sus contracciones se completa la acción digestiva mecánica. Además, en él se realiza también parte de la digestión química, gracias a la acción del jugo gástrico secretado por las glándulas que existen en sus paredes.
Al final el estomago se continúa con la parte superior del intestino delgado, que es el duodeno. 
Las enzimas que se encuentran en el jugo gástrico son la pepsina, que en presencia de ácido fragmenta las proteínas en peptonas; la renina, que coagula la leche, y la lipasa, que rompe las grasas en ácidos grasos y glicerol. Un tercer tipo de células producen mucosidades para proteger al estómago de sus propias secreciones. Cuando un trastorno psicosomático o patológico impide la secreción adecuada de mucosidad, la mucosa gástrica se erosiona y se forma una úlcera.
 INTESTINO DELGADO



Situado en la cavidad abdominal, el intestino delgado es un tubo alargado y hueco con paredes más delgadas que las del estómago. Mide entre siete y nueve metros de largo, plegado varias veces. Se divide en tres partes: duodeno, o parte más cercana al estómago; yeyuno, o porción media; e íleon, tramo final.
Al igual que el estómago, el intestino delgado tiene músculos que, al moverse, hacen que los alimentos vayan avanzando. La pared interior del intestino delgado no es lisa, sino que presenta una gran cantidad de vellosidades intestinales, las que están irrigadas internamente por pequeños vasos sanguíneos.
 Una vez digeridos los alimentos, sus componentes deben pasar a la sangre para ser distribuidos a todos los órganos del cuerpo. Cuando las enzimas digestivas han disociado las grandes moléculas de proteínas, polisacáridos, ácidos nucleicos y lípidos en unidades constituyentes, los productos son absorbidos por la pared del intestino, especialmente del delgado. Pequeñas fracciones en forma de dedo, llamadas vellosidades intestinales, cubren toda la superficie de la mucosa intestinal, cada una de las cuales contiene una red de capilares sanguíneos y un capilar linfático en su centro, al cual son transferidos los nutrientes. La mucosa del intestino delgado también secreta la hormona secretina, que estimula al páncreas para producir las enzimas digestivas
Una vez que han sido absorbidos los nutrientes, las materias restantes pasan del intestino delgado al grueso, dispuesto en el abdomen en forma de U invertida, de mayor diámetro y paredes más gruesas que los segmentos anteriores.
El intestino grueso desemboca en el colon. A poca distancia de la terminación del intestino se encuentra un área denominada ciego de cuyo extremo sobresale una porción del tamaño de un dedo meñique, llamada apéndice. Desde la unión de los dos segmentos del intestino, el colon ascendente, como su nombre lo indica, se extiende en dirección vertical por el lado derecho del abdomen hasta llegar a nivel del hígado. En ese lugar cambia de dirección en ángulo recto y se denomina colon transverso, el que cruza la cavidad abdominal por debajo del hígado y estómago. Ya a la izquierda del abdomen, vuelve a doblarse en ángulo recto y a tomar dirección descendente (colon descendente) hasta llegar al recto.
El colon elimina productos digestivos de desecho, que el cuerpo excreta como heces por el recto y ano. Cuando la comida llega al colon, ya se han absorbido los nutrientes esenciales para las funciones del cuerpo
La función principal del colon es convertir en heces el líquido del intestino delgado, llamado quimo. Los millones de bacterias del colon producen vitaminas K y B, así como los gases de hidrogeno, anhídrido carbónico, sulfuro de hidrógeno y metano. El recubrimiento del colon secreta mucus para lubricar el interior del intestino y facilitar el paso de las heces. Pero además crea anticuerpos que protegen el sistema contra posibles enfermedades.


En el tracto intestinal viven miles de millones de bacterias, que si se mantienen en esta parte del cuerpo son totalmente inofensivas para el individuo. Estos microorganismos se alimentan de la fibra no digerida de la materia fecal y ayudan a reducir así la cantidad de heces que se producen.
Aunque las materias que llegan al colon han perdido mucha parte de sus componentes, el conjunto todavía es líquido. Cierta cantidad de agua es absorbida en el intestino delgado, aproximadamente la equivalente a la aportada por la bilis y el jugo pancreático. La principal función del colon es absorber agua y reducir los desechos a consistencia semisólida. En el colon se producen también movimientos peristálticos, aunque de frecuencia más lenta. Cada cierto tiempo, los movimientos peristálticos más enérgicos impelen las materias hacia el recto, siendo más frecuentes después de haber comido, debido a un mecanismo reflejo por el cual la contracción del estómago estimula el vaciamiento del colon.
La defecación en parte es voluntaria, debido a la contracción de los músculos de la pared abdominal, del diafragma y a la relajación del esfínter externo del ano, y en parte involuntaria, dependiente de la relajación del esfínter interno del ano y de la contracción del intestino grueso y el recto, que impulsan las heces hacia el ano. La distensión del recto y el estímulo resultante de los nervios de sus paredes es lo que despierta el deseo de defecar.

Recto y ano

El recto forma parte del intestino grueso y está situado a continuación del mismo. Su forma es cilíndrica, excepto en su parte inferior, llamada ampolla. La parte terminal del intestino o recto mide unos 15 centímetros de longitud y debe este nombre a su forma casi recta.
La salida del recto se llama ano. Posee una longitud de trece centímetros y está cerrada por un músculo que lo rodea, el esfínter anal.



GLANDULAS ANEXAS
GLADULAS SALIVALES: Son tres pares: Dos Parótidas situadas una a cada lado de la cabeza, delante del conducto auditivo externo, dos Submaxilares situadas en la parte interna del maxilar inferior, y dos Sublinguales debajo de la lengua. Todas ellas tienen la función de salivar los alimentos triturados en la boca para facilitar la formación del bolo alimenticio.
EL HIGADO: Glándula voluminosa de color rojo oscuro que produce la bilis y la almacena en la vesícula biliar para que, sólo durante las comidas y a través del conducto colédoco, vaya a desembocar en el duodeno y facilite la digestión del bolo alimenticio.

EL PANCREAS
El páncreas es una glándula situada en el abdomen, entre el estómago y la columna vertebral, y cercana a otros órganos como el intestino o el hígado. Con su peculiar forma de pera, el páncreas es el encargado de fabricar insulina y otras hormonas, que llegan al flujo sanguíneo y circulan por todo el organismo con el objetivo de emplear o acumular para más adelante la energía procedente de los alimentos. Además, esta glándula también segrega jugos pancreáticos, que contienen enzimas necesarias para digerir la comida.

EL HIGADO
El hígado regula los niveles sanguíneos de la mayoría de los compuestos químicos y excreta un producto llamado bilis, que ayuda a eliminar los productos de desecho del hígado. Toda la sangre que sale del estómago y los intestinos pasa a través del hígado. El hígado procesa esta sangre y descompone los nutrientes y drogas en formas más fáciles de usar por el resto del cuerpo. Se han identificado más de 500 funciones vitales relacionadas con el hígado. Entre las funciones más conocidas se incluyen las siguientes:
*La producción de bilis, que ayuda a eliminar los desechos y a descomponer las grasas en el intestino delgado durante la digestión.
*La producción de determinadas proteínas del plasma sanguíneo.
*La producción de colesterol y proteínas específicas para el transporte de grasas a través del cuerpo.
*La conversión del exceso de glucosa en glucógeno de almacenamiento (glucógeno que luego puede ser convertido nuevamente en glucosa para la obtención de energía).
*La regulación de los niveles sanguíneos de aminoácidos, que son las unidades formadoras de las proteínas.
*El procesamiento de la hemoglobina para utilizar su contenido de hierro (el hígado almacena hierro).

*La conversión del amoníaco tóxico en urea (la urea es un producto final del metabolismo proteico y se
Excreta en la orina).
*La depuración de la sangre de drogas y otras sustancias tóxicas.
*La regulación de la coagulación sanguínea.
*La resistencia a las infecciones mediante la producción de factores de inmunidad y la eliminación de bacterias del torrente sanguíneo.





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